La Asociación Profesional de Artesanos de Aragón está formada por más de 130 profesionales de la artesanía de la Comunidad. La mayoría son pequeños autónomos, pero también hay microempresas con algún trabajador.
Este sector, a pesar de representar el 0,4% del PIB y el 2,4% del PIB industrial, no es tenido en cuenta como sector productivo y generador de trabajo y riqueza de Aragón y, por ende, de España.
Desde que se ha decretado el estado de alarma, el sector ha quedado totalmente paralizado. El Gobierno les permite seguir trabajando, y muchos artesanos así lo están haciendo, pero sin movimiento económico, ya que sus principales fuentes de ingresos son las ferias (canceladas o suspendidas), los cursos en centros de ocio, de mayores o escuelas (cancelados), las propias tiendas-taller (cerradas al público), encargos de empresas y particulares (la mayoría, cancelados).
Como consecuencia, el sector cuenta con ingresos cero pero con la obligación de seguir pagando todos los gastos que e derivan de la actividad, más lo de la vida particular.
Como colectivo vulnerable, ya que no mueve grandes cifras y su capacidad productiva no es alta, reclaman que el Estado les tenga en cuenta y dé más facilidades de las expuestas hasta ahora: créditos a coste cero de interés y cancelación de la cuota a la Seguridad Social, si no hay actividad no debe cobrarse.
La asociación sabe que en estos momentos se debe ser solidario y no solo mirar por el individuo, pero denuncia que el peso de esta crisis no puede caer sobre los mismos. Espera un futuro incierto a los empresarios y necesitan, más que nunca, el apoyo de las instituciones del Estado para poder seguir adelante.