Hoy se ha firmado la renovación del V Acuerdo de Solución de Conflictos Laborales en Aragón, un pacto que ha reafirmado el compromiso de los agentes sociales y el Gobierno de Aragón con la estabilidad, el entendimiento y la colaboración en las relaciones laborales de la Comunidad.
Este nuevo acuerdo ha supuesto la continuidad de una senda iniciada en 1996, cuando se firmó el primer texto que apostó por la resolución autónoma de los conflictos sociales. Dos años después nació el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA), que desde sus inicios ha demostrado ser un mecanismo eficaz y consolidado, capaz de transformar la negociación colectiva y fortalecer la cohesión social.
La vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, ha recordado que “en el año 2023 se incorporaron nuevos retos a través de una declaración institucional y se definió una hoja de ruta para seguir avanzando en el diálogo social, buscando la cohesión y la paz social”.
El acto ha contado con la participación de CEPYME Aragón, CEOE Aragón, UGT y CC.OO., que han celebrado conjuntamente este nuevo hito con una mesa redonda sobre los desafíos del diálogo social y la mediación en el contexto económico actual.
La presidenta de CEPYME Aragón, María Jesús Lorente, ha destacado que “este acuerdo promueve mecanismos ágiles, económicos y accesibles de mediación y conciliación, especialmente pensados para las pequeñas empresas y los autónomos, que no disponen de grandes departamentos jurídicos. Resolver los conflictos de manera dialogada no solo evita tensiones, sino que impulsa la productividad, mantiene la continuidad del negocio y preserva las relaciones laborales”. Lorente ha subrayado además que la resolución temprana de los conflictos supone “un ahorro importante de recursos para la Administración de Justicia y refuerza la confianza en el tejido económico aragonés”.
El SAMA se ha consolidado así como un modelo de éxito del diálogo social, un espacio vertebrador que ha permitido transformar los desacuerdos en consensos y convertir a Aragón en referente nacional en la gestión autónoma de los conflictos laborales.
Con esta quinta edición, el Acuerdo se ha proyectado como un pacto para toda la legislatura, que refuerza la estabilidad social y económica de la Comunidad y pone en valor el papel de los agentes sociales como garantes del progreso, la paz social y la competitividad de las empresas aragonesa
