
La DGT pone en marcha, a partir del próximo lunes 14 de julio y hasta el 20 del mismo mes, una campaña de vigilancia y control sobre el consumo de alcohol y drogas en nuestras carreteras con el objetivo de reducir las actitudes de los usuarios que implican comportamientos de alto riesgo para la seguridad de la circulación, su propia vida y la del resto de usuarios de la vía.
El consumo de alcohol y drogas tienen gran relevancia sobre la siniestralidad vial, tanto por el aumento de riesgo de siniestro durante la conducción, como por el aumento de la severidad de las lesiones de los accidentados. En el año 2023, con datos definitivos, fallecieron en Aragón 63 personas en siniestros de tráfico en vías interurbanas, y un 30% de los conductores arrojaron resultados toxicológicos positivos en autopsias y análisis de alcohol, drogas o psicofármacos, aisladamente o en combinación, realizados por el Instituto de Medicina Legal de Aragón, dando dimensión de la problemática que existe.
El Plan de Acción Mundial sobre el Alcohol 2022-2030, aprobado en la 75ª Asamblea Mundial de la Salud de la OMS, refiere en su primer párrafo lo siguiente sobre la relación del alcohol con la seguridad vial: “El consumo nocivo del alcohol tiene unas repercusiones de gran alcance sobre la salud que, además, se extienden más allá de los propios consumidores, ya que también afectan, por ejemplo, a las víctimas de la conducción bajo sus efectos y de la violencia interpersonal, o a los niños con trastornos del espectro alcohólico fetal, entre otros.”
En la campaña realizada en diciembre del año pasado, del total de pruebas realizadas a los conductores en vías interurbanas y urbanas, un 0,9% resultaron positivas en alcohol y un 41% resultaron positivas en drogas.
El alcohol sigue estando presente en muchos de los siniestros con víctimas mortales y nadie puede engañarse respecto a sus efectos en la conducción como factor concurrente o desencadenante de siniestros. Es el indicador más mortífero, por lo que es necesario trasladar a la ciudadanía la gravedad de esta cuestión.
La Dirección General de Tráfico apuesta por erradicar las conductas de los conductores que ponen en riesgo la seguridad vial, en particular, tras haber ingerido algún tipo de sustancia psicoactiva, motivo por el cual se ha endurecido la normativa al respecto, con atención especial a los reincidentes, tanto en la vía administrativa, como en la vía penal.
Además, desde el 6 de julio de 2022, los conductores de los vehículos destinados al transporte de viajeros por carretera que dispongan de interfaz para la instalación de alcoholímetros antiarranque, estarán obligados a utilizar esos dispositivos. La normativa europea, Reglamento (UE) 2019/2144, establece la obligación de que lleven el interfaz todos los vehículos homologados a partir de la fecha del 06/07/2022 y los vehículos matriculados nuevos a partir de la fecha del 07/07/2024.
Solo a través de un compromiso colectivo, guiado por la evidencia científica y el interés común, será posible alcanzar resultados duraderos y efectivos en la lucha contra el alcohol al volante.




