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El número de personas desempleadas registradas en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) descendió en 4.846 personas en septiembre respecto al mes anterior, situándose en un total de 2.421.665 personas, la cifra más baja en un mes de septiembre desde el año 2007. Se trata de un dato especialmente significativo, ya que es la primera vez desde 2007 que el paro baja en septiembre —exceptuando el periodo de la pandemia— en un contexto en el que, además, la reducción interanual es de 153.620 personas (-6 %), una cifra muy superior al propio ritmo de crecimiento económico.

En Aragón el paro descendió en septiembre en 657 personas (-1,4 %) respecto al mes anterior, situándose en 47.824 desempleados, la cifra más baja en un mes de septiembre desde 2007, según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social. En el último año, la comunidad ha reducido en 3.099 personas el número de parados, lo que supone un descenso del 6,1 % interanual. Por sectores, el desempleo bajó en servicios (-587 personas), industria (-155) y construcción (-52), mientras que aumentó en agricultura (+126) y en el colectivo sin empleo anterior (+11).

En cuanto a provincias, Zaragoza concentró la reducción más significativa, con 737 parados menos, mientras que en Huesca y Teruel el paro creció en 71 y 9 personas, respectivamente.

Contratación y perfil de desempleados

En septiembre se formalizaron en Aragón 50.341 contratos, un 8,8 % más que en el mismo mes del año anterior. De ellos, 18.157 fueron indefinidos (+4 % interanual) y 32.184 temporales (+11,8 %).

Por sexos, el desempleo afecta a 29.437 mujeres y 18.387 hombres, lo que refleja una persistente brecha de género. Asimismo, mientras el paro de mayores de 25 años se redujo en 907 personas, el desempleo juvenil aumentó en 250 jóvenes (+5,8 %).

El secretario general de CEPYME Aragón, en relación con los datos, ha señalado que: “Los datos sitúan a la comunidad en una posición de liderazgo en la generación de empleo, con una tendencia ascendente en el mercado laboral que debemos consolidar” No obstante, advirtió de la necesidad de reforzar las políticas activas en dos colectivos concretos: “Los jóvenes, porque las empresas deben encontrar un equilibrio entre premiar la experiencia y acoger a los nuevos egresados; y los mayores, porque necesitan recualificarse para acercarse a las demandas actuales del mercado laboral”.

Además, Pérez ha incidido en que: “Aunque la tendencia es favorable y celebramos que el paro haya alcanzado mínimos históricos, no podemos obviar que la tasa de desempleo en España se mantiene en el 10,29 %, una cifra todavía elevada para los estándares europeos. Seguimos liderando el ranking de países de la Unión Europea en número de desempleados, con más de 2,42 millones de personas en paro”

Más de medio centenar de personas han participado  en la jornada organizada por CEPYME Aragón e Ibercaja Banco para conocer en detalle la futura puesta en marcha de la Ley de la Empresa Familiar en Aragón, una normativa aprobada recientemente en las Cortes de Aragón que, sin embargo, no entrará en vigor hasta finales de 2025.

La iniciativa se enmarca en el acuerdo estratégico que mantienen ambas entidades con el objetivo de acercar a pymes y micropymes aragonesas cuestiones clave relacionadas con la cultura financiera y la planificación empresarial.

La presidenta de CEPYME Aragón, María Jesús Lorente, ha destacado durante su intervención la importancia de trasladar a las pequeñas empresas familiares herramientas que hasta ahora estaban más presentes en grandes compañías:

“Las grandes empresas tienen protocolos claros en materia de pactos sucesorios, régimen de fiducia o relevo generacional. Nuestro tejido empresarial, formado en gran medida por micropymes y pequeñas empresas familiares, se enfrenta a más burocracia y a mayores dificultades para planificar. Por eso, jornadas como esta, en colaboración con un socio estratégico como Ibercaja, resultan fundamentales para que la normativa llegue a quienes más lo necesitan”, ha señalado

Lorente ha recordado  además la preocupación existente en torno al relevo generacional en el tejido empresarial aragonés:

“Nos encontramos con negocios familiares con una trayectoria de 50, 70 e incluso 100 años que hoy no cuentan con una persona llamada a ponerse al frente. Es un desafío que preocupa tanto a la Administración como a las organizaciones empresariales”.

La jornada ha contado  con la bienvenida de Carlos Sánchez Burriel, director provincial de Ibercaja en Teruel, y con la ponencia de los fiscalistas Juan Linares y Rodrigo de Salazar. Ambos expertos pusieron el foco en tres aspectos clave de la futura normativa:

1. Seguridad y estabilidad para el empresario: la Ley busca reforzar la seguridad jurídica en la transmisión de empresas familiares.

2. Conexión con la normativa foral aragonesa: pese a la riqueza del derecho civil foral, en ocasiones no estaba alineado de forma adecuada con la fiscalidad.

3. Mejora en la fiscalidad de figuras específicas: instrumentos como el pacto de presente o la fiducia dispondrán de un marco fiscal más claro y atractivo para su utilización por parte de los empresarios.

Con esta jornada, CEPYME Aragón e Ibercaja reafirman su compromiso con el acompañamiento a las pymes y micropymes aragonesas, impulsando espacios de reflexión y formación que permitan anticiparse a los retos normativos y de gestión que marcarán el futuro de la empresa familiar en la Comunidad.

Además, tras la jornada se procedió a la firma de la renovación del convenio de colaboración 2025-2026 entre ambas entidades, un acuerdo que permitirá continuar avanzando en la senda de la cultura financiera. La firma, que tuvo lugar en Teruel, contó con la participación de la presidenta de CEPYME Aragón, María Jesús Lorente, y del director Director Territorial de Aragón en Ibercaja Banco, Antonio Lacoma.